martes, 10 de diciembre de 2013

El software libre ¿es realmente libre? - #escenariostec

Lo sé. Está de moda. Los usuarios lo quieren. Las empresas lo usan cada vez más. Hasta las administraciones lo fomentan. Pero, ¿hasta qué punto el software libre es realmente “libre”?
Lo cierto es que no hay un programador hoy en día que se precie de serlo que no haya programado alguna vez o usado software libre.
Y es que sus ventajas son muchas:
1. Es gratuito: no se paga nada por usarlo o por programar con él.
2. Su código fuente es abierto (open source): es decir, es público. Cualquiera puede acceder a él a texto completo y sin restricciones.
3. Se puede copiar y modificar a tu antojo, sin aparentes restricciones.
4. Hay, literalmente, miles de programadores que lo actualizan y mejoran continuamente.
Estas ventajas contrastan enormemente con el tradicional modelo del llamado “software propietario”, cuyo máximo exponente ha sido y sigue siendo el desarrollado por Microsoft, con Windows y MS Office a la cabeza, donde hay que pagar por su uso, su código fuente es cerrado e inaccesible, no se puede copiar ni modificar sin autorización y su base de programadores es limitada al personal integrante o contratado directamente por la compañía propietaria.
De hecho, a menudo se presenta al software libre como el “bueno y generoso” y al software propietario como el “malo y egoísta”. ¿Es esto realmente así? Veremos.
Ambos modelos derivan de una misma normativa: la que se aplica para proteger los bienes inmateriales con un contenido intelectual o industrial. En nuestra legislación, dicha protección se garantiza mediante los llamados “derechos de autor” (también denominados “copyright” o “derechos de propiedad intelectual”).
Así, al contrario de otros países como EE.UU. que lo cataloga como objeto de patenteen nuestro Derecho el software se protege como una creación artística o científica más en virtud del artículo 10 de la Ley de Propiedad Intelectual.
En base a dicha normativa, el dueño original de un programa de ordenador es su autor, es decir, su programador, conjunto de programadores o la empresa en que se integren.
Esto es común a ambos sistemas.
¿Qué varía entonces? ¿Qué hace tan distintos al software libre del software propietario?
Pues muy sencillo: su licencia de uso.
Una licencia no es otra cosa que el conjunto de reglas o condiciones que un autor dispone para regular el uso de su obra. En otras palabras, es un documento que plasma las normas de uso de un programa según la voluntad de su titular.
Como usuarios de un programa informático, su licencia de uso nos dice lo que podemos hacer con él (a lo que estamos autorizados) y las condiciones que debemos de cumplir en dicha utilización.
¿Y qué pasa si la licencia “se deja algo en el tintero”? Por ejemplo, ¿si no nos dice si podemos o no modificar el programa?
Pues, en dicho caso, lo omitido no estará permitido: en derechos de autor todo lo que no está expresamente autorizado, se entiende que está prohibido (salvo excepción legal, claro, como lacopia privada que, por cierto, no se aplica al software).
¿Y cuántos tipos de licencias hay? La respuesta es tan clara como contundente: infinitas o, al menos, tantas como autores y obras, dado que cada uno puede redactar la suya propia en cada caso y sin más límites que la propia Ley.
Sin embargo, como anunciamos, hay dos grandes categorías de licencias de programas de ordenador: las licencias de “software libre” y las licencias de “software propietario”.
Empezamos por estas últimas: Las licencias de software propietario se caracterizan, con carácter general, por lo siguiente:
1. Tienen un coste económico: cuando hablamos de “comprar un programa” en realidad nos referimos al pago por una licencia de uso del mismo (no tendríamos dinero suficiente para “comprar Windows” aunque sí para comprar su licencia de uso, que es lo que realmente hacemos).
2. Su código fuente permanece oculto y cerrado. Sólo es conocido por los propios programadores de la empresa titular. Se prohíbe, por tanto, la descompilación o descubrimiento del mismo.
3. Se limitan las copias que se pueden hacer del programa así como el número de ordenadores dónde se puede instalar: coloquialmente hablamos de licencias de uno o cinco equipos o “de una o cinco licencias”.
4. Se prohíbe cualquier modificación o alteración del programa sin la autorización expresa de su titular.
Por el contrario, como veíamos al principio del artículo, las licencias de “software libre” son mucho más permisivas: no tienen coste económico, el código fuente es público y abierto, puede ser modificado libremente por cualquiera y se puede copiar e instalar en un número ilimitado de equipos.
Está claro que este tipo de licencias son mucho más “libres” o menos restrictivas que las tradicionales de software propietario pero ¿lo son totalmente?
La respuesta es no.
Para que una obra sea “totalmente libre” (es decir, que esté “libre de restricciones”) sólo existe una fórmula: que dicha obra sea “de dominio público”.
Bien es cierto que todas las obras terminan siéndolo, al transcurrir su plazo legal de protección: 70 años desde la muerte de su autor o, en el caso del software de empresa, desde el año siguiente a su comercialización. Así, en 2053 el MS-DOS 1.0 será de domino público (poco podremos hacer con él para entonces, ¿verdad?).
Sin embargo, hay una forma más rápida: que el propio autor decida convertir su obra en “dominio público” (es decir, libre de copyright). Pero lo cierto es que pocos utilizan dicha fórmula y se prefiere ir, en su caso, a licencias modelo de tipo de “copyleft” o “Creative Commons” (que son una modalidad de las de “software libre” pero también aplicables a otro tipo de obras: textos, fotografías, música, vídeo, etc.)

Y aquí viene la pregunta del millón: ¿Si las licencias de software libre no son realmente libres, cuáles son sus restricciones? ¿Qué limites tengo a la hora de usar o modificar un programa de software libre?
Obviamente, las restricciones concretas varían de una licencia a otra. Como hemos visto hay virtualmente miles o incluso millones de tipos de licencias de software libre. Las más conocidas son las licencias del tipo GNU/Linux, las GPL, en sus distintas versiones, las BSD o las de proyectos concretos como las de Mozilla, la histórica de Netscape, etc.
En cualquier caso y para simplificar, podemos hablar de las siguientes restricciones o límites comunes en la mayoría de licencias de software libre:
1. El uso siempre será gratuito: podemos hacer copias y distribuirlas libremente pero nunca podremos cobrar por ellas. “Pero”, me diréis, “hemos visto Linux a la venta en el Centro Comercial, ¿cómo es posible?” Muy sencillo: se cobra sólo por los materiales físicos (caja, CDs, y papel del manual) y por el servicio frecuentemente asociado de soporte y mantenimiento online o telefónico (en sus distintas modalidades).
2. Cualquier programación o cambio realizado en el código fuente, debe ser pública también y su código derivado debe permanecer abierto.
3. Todo nuevo programa que derive total o parcialmente de software libre, debe seguir, obligatoriamente, con el mismo tipo de licencia. Es decir, no se puede aprovechar el código abierto para una aplicación informática que luego se comercialice como software propietario. Dicha aplicación deberá asumir la licencia de software libre, con todo lo que ello implica.
Estas son las restricciones más importantes y que, desgraciadamente, se suelen incumplir en muchos casos. Hay empresas que se aprovechan de los avanzados y casi ilimitados recursos de código abierto que se encuentran en la Red para incorporarlos a sus propios proyectos y programas en desarrollo (con un importante ahorro de tiempo y costes de programación) para luego comercializarlos como software propietario y lograr una ventaja injusta en dicho mercado. Dicha práctica es ilegal.
Como hemos visto, el software libre, a pesar de su nombre, no es totalmente “libre” y debemos de tener en cuenta sus “límites y condiciones” antes de decidirnos por su uso en nuestra organización o en nuestra propia casa.

En resumen, hay que leer (y entender bien) la licencia, aunque a veces haya que comprar lupa para ello…

5 FORMAS EN QUE LOS MOOC ESTAN CAMBIANDO LA EDUCACION - #escenariostec

1. NUEVAS COMPETENCIAS EN LAS INSTITUCIONES YA ESTABLECIDAS

"El profesorado universitario suele destacar en la investigación, pero no es así en cuanto se refiere a la enseñanza y el aprendizaje", dice Horn. "No se les incentiva para ello; no es el modelo que se ha construído a su alrededor"

En los nuevos sectores de mercado, la integración de nuevas tecnologías suele ser exitosa porque no están encadenados a viejos y pre-exitentes modelos de negocio. En los casos de los proveedores de MOOC (Cousera, sin ir más lejos), su modelo de negocio aun está en formación y es posible que su flexibilidad sea mayor que la de las instituciones existentes

2. DESCENTRALIZACIÓN DE LOS SERVICIOS
Horn ha hecho la predicción: el 50% de los y las estudiantes estadounidenses habrán hecho, al menos, un curso en línea. Esto no quiere decir que substituyan a las universidades y otras instituciones académicas de educación formal, pero suponen un gran salto en lo que se refiere a pequeños servicios.

3. ABORDAR LAS DIVERSAS NECESIDADES DEL ESTUDIANTE

"Cada estudiante tiene diferentes necesidades de aprendizaje en cada momento". La Educación online tiene un punto fuerte en responder y solucionar de forma eficiente la instrucción individualizada

En el terreno académico más formal podemos estar discutiendo años sobre inteligencias múltiples, nuevos tipos de programación, estilos de aprendizaje, motivación, ludificación... pero el aprendizaje online es intrínsecamente modular y, en ese sentido, responde a las demandas del mercado.

4. RENDIMIENTO ECONÓMICO DE LA EDUCACIÓN

Un miembro del público preguntó a Horn si los MOOCs podrían desempeñar un papel determinante en esos casos en los cuales los  y las estudiantes no están interesados/as en obtener un valor, directamente, del (mucho) dinero que han invertido en una educación de calidad sino, sencillamente, cursar horas de clase para completar su formación (a modo de "un medio para un fin"). Aunque los MOOC no sean la panacea, sí pueden ser la respuesta en algunos casos a esta demanda

5. COMIENZO DEL IMPACTO SOBRE EL BACHILLERATO Y E.S.O.

"De hecho, seguramente, en muchos casos, será un impacto mayor en el Bachillerato que en la Educación Superior" La irrupción de instituciones como MIT, Stanford o Harvard en el terreno de la Educación Online dota a los MOOC de prestigio. 

Wikis y blogs, dos grandes recursos para la formación - #escenariostec

En la web encontramos multitud de herramientas que, a día de hoy, están resultando muy útiles no sólo para la formación online, sino también para modalidades mixtas de aprendizaje en las que se combinan sesiones presenciales con entornos virtuales. Estos entornos, normalmente plataformas e-Learning, se usan cada vez más en conjunción con los medios sociales para sacarle todo el partido a los recursos de la Web 2.0, aprovechando la tendencia del alumno a participar en los mismos de forma natural.
Pues bien, aunque hay muchos medios sociales de los que podríamos hablar en relación a estos aspectos, en este artículo queremos centrarnos en dos de ellos: las wikis y los blogs. Ambos pueden funcionar como estupendas plataformas colaborativas en grupos de trabajo para proyectos específicos, permitiendo al docente realizar casos prácticos, explicar conceptos e incluso planificar tareas a largo plazo, que puedan ir desarrollándose a lo largo de todo un curso para medir resultados y sacar conclusiones a la finalización del mismo.
En el caso de las wikis, especialmente pensadas para ser editadas de forma colaborativa, estamos ante una potente herramienta de creación de contenido, rápida, efectiva y muy fácil de usar. Por su parte, cuando hablamos de los blogs damos un paso más a la hora de interactuar con terceros participantes (los lectores), quienes pueden añadir su punto de vista y ayudar a mejorar la información vertida en cada artículo. Ambas opciones, según el trabajo que se desee poner en marcha, son perfectamente válidas en la formación.
Pongamos un ejemplo para un hipotético curso de desarrollo de aplicaciones móviles en modalidad mixta. Durante las clases presenciales, el profesor explicaría los conceptos, herramientas y etapas necesarios para poner en marcha nuestra app. Cuando le llegara el turno a lo online, una wiki colaborativa entre el docente y los alumnos podría servir para ampliar los términos técnicos explicados, creando diferentes entradas que se irían completando entre todos y durante todo el curso con información extra, enlaces, recursos de interés, etc. Por su parte, el blog podría ser un espacio de reflexión y debate, que se alimentaría con diferentes artículos escritos por cada uno de los alumnos y también por el profesor. Para ello se crearía un cronograma de trabajo a comienzo del curso, y se establecerían una serie de temas a tratar en función del programa formativo. La redacción de estos temas, directamente relacionados con lo que se estaría viendo en cada momento del curso, sería una forma de potenciar que los alumnos se documentaran y ampliaran información por sí mismos, fomentando así también el auto-aprendizaje y el debate en clase y en los comentarios del blog.

Cuatro cosas que aporta un buen teletutor al alumno online - #escenariostec

La formación online no ha parado de crecer en los últimos años, y a día de hoy sigue en alza y ofreciendo cada vez una mayor variedad de cursos y programas en sectores muy diversos, que cubren importantes necesidades de aprendizaje. Tanto en el ámbito corporativo como fuera de él, el e-Learning está sirviendo para que muchas personas reciclen sus conocimientos y amplíen sus competencias valiéndose de metodologías flexibles, personalizables y dinámicas.
Y al igual que ocurre con la formación presencial, en la online uno de los grandes valores que maximizan el aprendizaje son los docentes, en este caso teletutores que pueden marcar la diferencia entre un curso excelente y una experiencia insatisfactoria. ¿Qué pueden aportar los teletutores al alumno de metodologías e-Learning? Pues, como mínimo, estos cuatro aspectos fundamentales:

Contacto humano
En los cursos online, muchos alumnos se lamentan de la sensación de soledad que produce tener que estudiar o realizar tareas frente al ordenador, sin el contacto con otras personas que proporciona el aula. Por eso uno de los grandes aportes del teletutor es mostrar ese lado humano del e-Learning, ya que también hay mucho de comunicación en esta modalidad.

Evaluación y recomendaciones
La formación online no puede ser siempre un proceso automatizado de estudio, realización de ejercicios y autoevaluación. Una de las grandes funciones del teletutor es la de dar feedback en determinadas tareas y aportar esos consejos, ideas, recomendaciones e incluso “trucos” que demuestran su área de experiencia y ofrecen al alumno un puntito extra en su aprendizaje.

Seguimiento y apoyo
Otro punto negativo que se suele achacar al e-Learning es que esta modalidad nos “obliga” a ser más autodisciplinados y constantes. El teletutor también puede ser una gran ayuda en estos casos, ya que otra de sus funciones es la de hacer un seguimiento del alumno para ver qué temáticas pueden estar costándole más trabajo y, por tanto, desanimándole.

Conocimientos añadidos
Dos de las áreas que, desgraciadamente, suelen aprovechar menos los alumnos de un curso online son las de los foros y archivos. Sin embargo, un buen teletutor puede aportar muchísimo en ambas, y por tanto los estudiantes podrían sacarle un gran partido a los conocimientos volcados en las dos. Por ejemplo, la sección de archivos de una plataforma e-Learning suele ser un área en la que colgar recursos de utilidad: documentos, vídeos, enlaces de interés, podcasts, infografías… Mientras que los foros podrían generar debates tremendamente útiles en los que tanto el teletutor como otros alumnos podrían presentar experiencias y casos de éxito propios o ajenos con los que enriquecer el temario de un curso.


Las soluciones a los 5 desafíos más comunes en eLearning - #escenariostec

Las soluciones a los 5 desafíos más comunes en eLearning
Desafío # 1: Resistencia al cambio
Uno de los retos a la hora de la implementación de eLearning es la falta de familiaridad con la metodología  porque no confían en que un programa de aprendizaje basado en la tecnología será tan eficaz como la enseñanza tradicional.
Soluciones:
§  Promocione los beneficios  
- El material de aprendizaje estará a su alcance cuando quiera realizar un repaso.
- Total flexibilidad horaria
- Puede centrarse en determinados temas
- Incluye recursos multimedia, lo que hace que el material sea más atractivo y fácil de asimilar.
Desafío # 2: Motivación de los alumnos
:  ¿Cómo podemos mantener a nuestros estudiantes lo suficientemente motivados para completar el curso? y ¿Cómo podemos hacer para que más allá de estar aprendiendo, disfruten de la experiencia de aprendizaje?
 Soluciones:
§  Establezca incentivos: Cursos destinados a lograr una acreditación o certificado dan a los colaboradores una meta tangible que los beneficia
Desafío # 3: Habilidad tecnológica de los estudiantes
Cualquier implementación de eLearning se verá limitada por la capacidad tecnológica  de los participantes que lo utilizan. La capacidad del alumno para acceder e interactuar con el material del curso determina la utilidad del programa.
 Soluciones:
§  Adapte el curso a los estudiantes: Este reto del eLearning puede ser mitigado si se adapta la complejidad del sistema a las necesidades del curso y de los participantes. Cuando el contenido que se enseña es bastante básico se puede utilizar una interfaz sencilla para impartir el curso, la complejidad se puede aumentar de acuerdo con el material del curso y la experiencia tecnológica de los alumnos.
§  Ofrezca  ayuda: Cuando los estudiantes  se enfrenten a diversos problemas al utilizar los cursos de eLearning,  deben tener acceso a algún servicio de soporte técnico. Chats en vivo, botones de autoayuda, correos electrónicos y foros de discusión, son sólo algunos ejemplos que puede ofrecer. Tener tutores o facilitadores de eLearning disponibles  también sirve para hacerles sentir esa presencia y que están siendo apoyados con el programa.
Reto # 4: Contenido
Una vez que el alumno se encuentra participando en el programa eLearning, el contenido del curso ocupa un lugar central. Un curso bien diseñado impartirá la información de manera clara y efectiva, mientras que un programa mal diseñado será difícil de usar y comprender. El contenido tiene que ser suficientemente interactivo para mantener a los estudiantes realmente involucrados y obtener un impacto.
 Soluciones:
§  Utilice la herramienta de desarrollo de eLearning correcta: El uso de una herramienta de desarrollo que permite la colaboración fácil y segura y contenga un sistema de revisión incorporado para dar seguimiento a los errores,
§  un formato flexible de ver la entrega de contenido, ya que esto permite a los estudiantes seleccionar y elegir sólo lo que necesitan.
§  Por encima de todo, ¡cree contenido relevante y de una forma creativa. Elimine información innecesaria o sobrecarga de contenidos para que los colaboradores puedan recordar sólo lo que es verdaderamente importante.
 Desafío 5: Evaluación de la eficacia
Uno de los retos del eLearning frecuentemente citado es determinar si el curso está teniendo el efecto deseado.¿cómo puede la persona encargada saber si la implementación de eLearning está logrando sus objetivos?
 Solución:
Deténgase y observe los resultados. ¿Cuántos empleados están utilizando el programa eLearning? ¿Cuánto tiempo pasan en el curso? y  ¿Cuántos completan el curso?
es más relevante definir  si su desempeño refleja los conocimientos recién adquiridos. Si los colaboradores muestran las habilidades y el conocimiento adquirido del programa eLearning en su trabajo, entonces la implementación de eLearning ha sido efectiva.


lunes, 9 de diciembre de 2013

Hola a todos,

Aquí os traigo una presentación sobre los MOOCs, si queréis conocer sus ventajas y características no podéis perdéroslo!

Un saludo,
David

http://prezi.com/uendcmsohnnw/?utm_campaign=share&utm_medium=copy

#EHUMOOC